En el marco de la discusión previsional, la industria apuntó a los bajos sueldos por los que cotizan los trabajadores como uno de los factores principales tras las bajas pensiones.
Durante diciembre del año pasado se pagaron 355.711 jubilaciones por vejez a mujeres, las que en promedio recibieron UF6,1, correspondiente a cerca de $180 mil de acuerdo a la UF de ese mes (considerando la pensión autofinanciada más aporte previsional solidario). En tanto, 258.751 hombres recibieron su pensión por vejez, cuyo monto promedió las UF10,24, unos $274 mil. De esta forma, tanto hombres como mujeres recibieron UF8,21 de jubilación en diciembre ($220.013). Pero las cifras no distinguen por años de cotización, ni por monto.
A diciembre de 2017 el 9,4% del total de los cotizantes hombres, equivalente a 291 mil, aportó por el tope imponible en su cuenta obligatoria de la AFP, es decir UF75,5 (poco más de $2 millones) . En este subgrupo, predominan aquellos que tienen entre 35 y 45 años. En el caso de los más jóvenes, es decir quienes tienen hasta 20 años, cotizaron 50 personas.
Por el contrario, para el mismo mes hubo 124.008 mujeres que impusieron por el mismo monto, las que representan el 5,4% de las cotizantes femeninas en la industria previsional. Al igual que los hombres, el grupo etario más significativo va entre los 35 y los 45 años.
Según las últimas cifras publicadas por la Superintendencia de Pensiones, al 31 de diciembre de 2017, el mayor número de cotizantes mujeres tiene un ingreso imponible entre los $300 mil y los $350 mil; grupo que incluye a poco más de 205 mil trabajadoras, que representan al 8,1% del total de las mujeres cotizantes, quienes, además, en su mayoría se concentran entre los 45 y los 55 años.
En el caso de los trabajadores, en tanto, el grupo más significativo es el de aquellos que tienen un ingreso imponible entre los $250 mil y los $350 mil, equivalentes al 13,6% del total de los cotizantes masculinos. Este grupo, eso sí, es seguido por aquellos que tienen un ingreso equivalente al tope imponible.
Los salarios
La diferencia en el número de mujeres y hombres que cotizan por el tope se da en un contexto en que, según las últimas cifras del INE (diciembre de 2016) la brecha salarial entre ambos promedia el 31,7%, donde la mayor diferencia se registra entre los trabajadores por cuenta propia (41,2%) y empleadores (39,7%) -personas que dirigen su propia empresa o que ejerce independientemente una profesión u oficio con personas a su cargo a los que remunera-. En el caso de los asalariados, la diferencia es de 19,3% con sueldos de $621.880 para ellos y de $502.083 para ellas.
Pese a la baja representatividad que tienen las mujeres de mayores ingresos en el sistema previsional, éstas, al igual que los hombres, han aumentado su participación relativa en la última década: en 2007 había 39.558 mujeres que imponían por el máximo, las que representaban sólo el 2,7% de las cotizantes, mientras que en el caso de los trabajadores estos eran 118.443, que representaban el 4,9%.
Lo anterior, se traduce en que las mujeres que cotizan por el tope han crecido en 3,1 veces en los últimos diez años, mientras que los hombres que imponen por el máximo legal se multiplicaron por 2,5 veces.
Cabe destacar que si en 2007 la participación laboral femenina era de un 40,3%, a diciembre de 2017 alcanzó un 49,3%.
Ingreso mínimo
Los registros de la Superintendencia también permiten detectar que hay 103.935 mujeres que cotizan por el ingreso mínimo y que tienen entre 18 y 65 años, de este total, 1.976 tienen entre 60 y 65 años, es decir ya superaron la edad legal de jubilación. A lo anterior, se suman 157 mujeres mayores de 65 años que también cotizan por el mínimo.
En el caso de las trabajadoras de casa particular, el regulador dio a conocer que hubo 22.463 que cotizaron por el mínimo, las que, en su mayoría tienen entre 45 y 55 años.
Para el caso de los hombres, aquellos que son mayores de edad, pero tienen menos de 65 años, es decir no han cumplido la edad legal para jubilar, hay 131.982 que cotiza por el ingreso mínimo, además de 519 mayores de 65 años que impone por el mismo monto y otros 4 menores de 18 años. Por último, hay 1.884 hombres que imponen por el mínimo y son trabajadores de casa particular.
Si se considera el total de varones que imponen por el mínimo, éstos representan el 4,3% del total de los cotizantes, mientras que en el caso de las mujeres, éstas equivalen al 5,5%.
Artículo de Bárbara Sifón
Fuente: Pulso