No, Donald Trump no inventó la distopía.
Pero quizás es el personaje que mejor la representa y la destapa ante nuestros ojos.
Su regreso al escenario político no es solo un fenómeno electoral. Es el síntoma más visible de una sociedad global que ha normalizado muchos rasgos de las peores ficciones distópicas: control emocional, manipulación mediática, verdades fragmentadas, líderes que no gobiernan con ideas, sino con pasiones elementales.
Trump no necesita ocultar su discurso autoritario ni su desprecio por las instituciones.
No necesita camuflar su populismo ni disimular su simplismo brutal.
Y lo más inquietante es que no le hace falta… porque la sociedad ya está preparada para aceptarlo.
¿Qué revela Trump sobre el mundo en que vivimos?
📌 Que la verdad ha dejado de importar.
Vivimos en una era donde los hechos se negocian. Trump puede negar lo evidente, repetir falsedades o modificar narrativas… y aun así conservar millones de seguidores fieles. La verdad ya no es objetiva, sino tribal.
📌 Que el espectáculo reemplazó al liderazgo.
No importa si un líder construye soluciones reales. Importa que sepa dominar la pantalla, dividir con fuerza y generar emociones intensas.
La política es show, la democracia un reality.
📌 Que la polarización es el nuevo sistema operativo.
La lógica binaria de “nosotros o ellos”, “patriotas o traidores”, “pueblo o élite” no solo simplifica la realidad: la convierte en guerra.
El conflicto constante se vuelve rentable y adictivo.
📌 Que la inteligencia ya no lidera.
El saber, el diálogo, la construcción… todo eso cansa. Hoy, el que grita más fuerte y usa frases cortas gana la conversación aunque no tenga razón.
📌 Que la distopía no llegó vestida de dictadura, sino de entretenimiento.
Ya no hace falta reprimir si todos están distraídos. Si el algoritmo entretiene, el poder puede operar sin resistencia.
4 comments on “Donald Trump no crea la distopía, la revela.”
Gracias por su artículo, quienes estamos preocupados por el futuro, ya no del mañana, sino el de mañana, estamos buscando el máximo de explicaciones a cómo se ha llegado a esto. Cómo una sociedad, supuestamente desarrollada cómo la de Estados Unidos, no ha sido capaz de conducirse bajo sus propias reglas y esto que le han impuesto desde siempre a todos los países que han intervenido y extraído sus riquezas, no han sido capaces de aplicarse a sí mismos.
Su “estilo de vida” los ha superado. Ya nada de lo que puedan obtener de los demás, les alcanza para sobrevivir.
¿Seremos capaces de evitar que se salgan con la suya?
¿Podrán las reglas establecidas para el libre comercio, detener la fuerza imperial que nos quieren imponer?
¿Llegaremos al punto en que ya no serán las palabras las que primen, sino la violencia desatada?
Creo que han sorprendido al mundo sin un Plan B.
Saludos…
Gracias Jorge Valenzuela, por difundir cultura por este medio.
Lo que el señor Donald Trump está haciendo en política es reaccionar visceralmente, sin medir las consecuencias que se pueden generar.
Son estados psicóticos de un gobernante, que presenta desequilibrios emocionales.
En mi opinión Trump revela la distopía, pero una creada a propósito desde hace mucho. Los medios pagados por un sector (hecho ya comprobado) manejan el relato a su antojo creando una realidad, o una irrealidad? que hace reaccionar a la maza de acuerdo a sus intereses. Se vislumbra un futuro gris si las sociedades no despiertan del encantamiento de los políticos con respaldo económico y de instituciones que lucran a su vez con el manejo y control de los ciudadanos. La Ignorancia paga.
Entiendo, que Donald Trump, es histriónico, bueno de acuerdo a lo que se sabe, lo ha sido siempre. Pero qué hombre de negocios no lo es, el que hace el mejor número actoral se lleva el beneficio. Pero a lo que nos ocupa, que Estados Unidos está en un régimen ditópico, yo personalmente creo que esa situación calza a Regímenes Autoritarios, que en el mundo sobran. Dicho esto, una vez más, en mi opinión, vista la tabla presentada por el Presidente de Estados Unidos, leo que los productos Americanos, pagaban Aranceles Aduaneros en los Países anunciados en la tabla, bastante altos, en comparación a los que desde este mes deberán pagar, cuando entren los productos del País anunciado a suelo Norteamericano. Ejemplo Chile con un Arancel de 10%, si una empresa Estadounidense, quiere importar Peras y Manzanas por un valor de US$100 y como dijimos Chile tiene asignado un Arancel de 10%, la empresa importadora, deberá pagar en Aduana US$10. Ahora bién vamos a la parte Tributaria, EEUU, no tiene impuesto a las Ventas, tiene impuestos estatales bastante bajos, incluso hay estados, que no cobran impuestos a las Ventas, en cambio Chile tiene una tasa de 19% pagada por los consumidores en beneficio del Estado. Quizá el Estado norteamericano, al igual que el Chileno gasta más de lo que recauda y ése déficit, en cualquier País del Mundo, lo pagan los contribuyentes. Pero eso no hace a EEUU un estado ditópico, ni utópico, como creo si lo son los sepultureros del sistema Neoliberal.