Un crecimiento de 4,2% anual expuso la economía chilena durante el primer trimestre, consignó esta mañana el Banco Central. El organismo informó a través de sus Cuentas Nacionales que con un día hábil menos que el primer trimestre de 2017, el efecto calendario resultó igual a -0,1 puntos porcentuales. Desde la perspectiva del origen, se observaron incrementos en la mayoría de las actividades, destacando minería por su dinamismo y contribución predominante; en menor medida, también se distinguieron comercio y servicios personales en términos de incidencia. En tanto, las actividades agropecuariosilvícola y pesca, se contrajeron. Por su parte, las cifras ajustadas estacionalmente dieron cuenta de un incremento de 1,2% del PIB, con respecto al cuarto anterior. En tanto, el agregado no minero creció 1,1%, siendo electricidad, gas, agua y gestión de desechos (EGA), comercio, servicios personales, y pesca las actividades de mayores incidencias.
Cabe mencionar que en cifras del INE la exigua base de comparación pesó en el desempeño de la producción industrial, ámbito que expuso fuertes avances anuales de 5,2%, 9,1% y 8,7%, en enero, febrero y marzo, respectivamente, mientras que el Índice de Producción Minera (IPMin) creció 5,8%, 17% y 27%. El robusto incremento de las faenas mineras durante marzo, en particular, se dio como consecuencia del alza de 27,6% en la Minería Metálica , que incidió 26,334 puntos porcentuales en la variación del indicador. Ello, a su vez, fue impulsado por Extracción y procesamiento de cobre debido al incremento anual de 30,9% en el índice de cobre. Este producto presentó una baja base de comparación, a raíz de una mantención y de una importante huelga ocurrida entre febrero y marzo de 2017. Además, durante marzo de 2018 se registró un mayor tratamiento del mineral.
Por su parte, el Índice de Producción de Electricidad, Gas y Agua (IPEGA) se incrementó 1,4%, 2,9% y 1,8% en los meses de análisis, y el Índice de Producción Manufacturera (IPMan) trepó 5,7% en enero y 4,2% en febrero mientras que se contrajo 2,4% en marzo.
Asimismo, las ventas del comercio se expandieron 3,9%, 3,5% y 4,1% en el primero, segundo y tercer mes del ejercicio, en cada caso, con especial dinamismo en las ventas de bienes durables (12,9%, 8,3% y 9,9%).
Comportamiento del gasto
En esta línea, el Banco Central destacó que desde la perspectiva del gasto, el PIB se vio impulsado por la demanda interna y, en menor medida, por el ascenso de las exportaciones netas. El gasto creció 3,8%, incidido principalmente por el consumo (alza de 3,6%), en particular, de hogares (3,9%). La inversión también contribuyó al resultado, tras el aumento generalizado de la formación bruta de capital fijo (FBCF), que creció 3,6% y, en menor medida, de una mayor acumulación de existencias, que alcanzó un ratio de 0,6% del PIB en un año, a precios del año anterior.
Respecto del comercio exterior de bienes y servicios, las exportaciones e importaciones se elevaron 7,2% y 6,1%, respectivamente, reflejo del comportamiento del componente de bienes. En el caso de los envíos, el resultado se explica por los de cobre y, en menor magnitud, de frutas y salmón procesado. En el caso de las internaciones, el impulso provino de las compras de maquinaria y equipos, donde destacaron las de automóviles y maquinaria de uso industrial.
Fuente: Estrategia