En un anuncio de domingo, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, comentó que a partir de este lunes 20 de abril unos 60 mil contribuyentes recibirán un email del Servicio de Impuestos Internos (SII) con un contenido inédito en la historia de las políticas públicas tributarias: cada persona sabrá adónde fueron a parar los gravámenes que pagó.
Por supuesto, se trata de un ejercicio pedagógico e intenta ilustrar cómo los impuestos efectivamente pagados por cada contribuyente se utilizan en todo orden de productos y servicios del Estado. Se trata de una de las iniciativas más vistosas propuestas por la Comisión de Gasto Público, convocada por Hacienda y que preside Jeannette Von Wolfersdorff.
A través de un hilo en Twitter, el ministro dijo que “si las personas nos aportan los recursos que financian el Estado, como autoridades tenemos el deber de asegurarnos de que se usen de la mejor manera y de rendir cuenta de aquello”.
Quienes recibirán esta información fueron escogidos en forma aleatoria. Obtendrán uno de los tres modelos de explicación que el Gobierno determinó a partir de unas 800 encuestas en terreno. Se busca, así, conseguir una retroalimentación que permita, con posterioridad, escoger el “prototipo” más adecuado.
En los ejemplos a continuación, se asume que el contribuyente pagó un total anual de $1.468.934, monto que corresponde a sus aportes mediante Impuesto a la Renta y el IVA.
Al final de cada modelo siempre hay una información general de ingresos y egresos de todo el Fisco.
El primer modelo: “Estadístico”
“Corresponde a un informe estadístico, basado en la clasificación funcional del gasto”, resume el ministro.
Está construido sobre la base de dos grupos de información: por “tipo” y por “área”.
Arriba, en una regla horizontal, aparece el “tipo” de aportes, que van desde lo destinado al sueldo de empleados públicos, lo usado en beneficios y subsidios, y además lo que se invierte, entre otros conceptos. Por ejemplo, el contribuyente de este ejemplo aportó unos $300 mil a los empleados públicos, $765 mil a subsidios, y $227 mil a inversión pública, todo lo cual provino del casi $1,5 millón de sus impuestos pagados al Fisco.
Pero este modelo hace también otro ejercicio: más abajo indica cuánto del mismo $1,5 millón de este contribuyente va a parar ahora a las “áreas” más importantes de lo que gasta el Estado.
Se presenta como un gráfico de barras. Así, por ejemplo, este ciudadano contribuyó con $356 mil al área de Protección Social, con $323 mil a Educación, con $305 mil a Salud, y con $100 mil a Seguridad y Orden Público, entre otras.
El segundo modelo: “Cinco áreas clave”
En este modelo, se prioriza el diseño y se resume el alcance de los aportes de los contribuyentes.
“El segundo modelo detallará la entrega de bienes y servicios en cinco áreas clave del gasto a nivel país: Educación, Pensiones, Vivienda, Salud, (e) Infraestructura y Conectividad”, comenta Briones.
Se dice, por ejemplo, que son el dinero recibido se financió la educación de más de 2,9 millones de estudiantes desde prebásica a media, y la mejora y pavimentación de 2.472 kilómetros de caminos.
Sin embargo, este modelo no entrega cuál fue el destino “personalizado” de los impuestos pagados por cada contribuyente, sino que lo mezcla con todos los tributos enterados al Fisco ese año.
El tercer modelo: “Impacto regional”
“El tercer modelo detallará las mismas cinco áreas claves”, continúa el titular de Hacienda, “pero lo hará con la información correspondiente a la región del contribuyente”.
En este ejemplo se habla del caso de la Región de Tarapacá. Según se ilustra, el conjunto de los aportes tributarios de los contribuyentes permitió financiar la construcción de un hospital y dos centros de salud primaria, así como el apoyo a subsidios de vivienda a más de cuatro mil habitantes de esa región.
Al igual que el segundo modelo, los ejemplos aquí muestran el impacto conjunto de los contribuyentes y no el efecto personalizado del ciudadano que recibirá esta información.
¿Qué viene después?
Habrá una evaluación de los tres modelos hasta el 8 de mayo. “Los contribuyentes que hayan recibido uno de los modelos serán encuestados con el objetivo de recoger esa información y mejorar la iniciativa en el futuro”, comenta el ministro Briones.
Estos ejercicios de consulta son muy utilizados en las ciencias sociales. Si la metodología es clara y se aplica de manera estandarizada, el Gobierno podría obtener una respuesta adecuada al interés del grueso de los contribuyentes.
Los equipos a cargo no tendrán mucho tiempo para procesar esos datos: la instrucción es que ya en mayo se envíen los reportes definitivos, con un solo modelo, a los 3,5 millones de personas que realizaron su declaración de impuestos en la Operación Renta.
Fuente: Pauta
Autor: Eduardo Olivares