El estudio Women in Work Index 2022 de la consultora PwC situó a Chile en el puesto 31 entre 33 países de la OCDE en cuanto a la inclusión laboral femenina, cuya ocupación se desplomó en tiempos de pandemia.
Pero incluso antes del Covid-19, la ocupación de las mujeres nunca ha superado el 50 por ciento, y desde el 36,4 por ciento al que llegó en los últimos dos años, se ha recuperado paulatinamente hasta el 44,9 por ciento, de acuerdo al INE.
El análisis dado a conocer este miércoles y consignado en La Segunda fue elaborado sobre -entre otras cosas- la base de indicadores de brecha salarial, participación laboral y desempleo femenino, los que permitieron a Chile subir de 42,7 a 48 puntos en la medición.
Si bien es el segundo país que más mejoró en el ítem de brecha salarial, sólo superó a México y Corea del Sur en términos de inclusión femenina, listado que en contraste, es liderado por Nueva Zelanda.
Según Pablo Gómez, socio de People and Organization de PwC Chile, “la mejora de los indicadores se debe, en nuestra opinión, a la apertura de las organizaciones a favorecer el teletrabajo, la estabilidad del escenario país y la escasez de talento en general”.
Por otra parte, el estudio sostiene que en caso de aumentar el número de mujeres trabajando en Chile hasta igualar las tasas de Suecia (67 por ciento), el país sería uno de los mayores beneficiados en términos de alza del PIB, con potenciales ganancias de crecimiento del orden del 25 por ciento por año.
Una cifra similar obtendría Italia, mientras que México vería un alza de 27 por ciento, ambos países que también cuentan con una baja participación laboral femenina.