En su primer año de vigencia, 8 de cada 10 empresas cumplieron con la Ley de Inclusión Laboral, que exige a aquellas compañías con más de 200 trabajadores tengan al menos dos de ellos en situación de discapacidad.
Sin embargo, hay más alternativas que el solo contratar directamente para así cumplir con esta normativa. Situación que para algunos aún tiene desafíos mayores.
Un ejemplo de cómo las empresas se han hecho parte de esta ley es el caso de Miguel Oviedo era la cocina. En 2005 un atropello le impidió seguir trabajando en un restaurant, pero aunque no camina ni mueve los dedos de sus manos, siguió buscando oportunidades laborales. Hizo distintos cursos de capacitación, pero con el tiempo comenzaron las trabas.
En noviembre del año pasado llegó a Grupo Eulen Chile, una empresa de servicios que lo capacitó como guardia de seguridad. Desde 2009 que en este lugar contratan a personas con discapacidad. Hasta la fecha hay registradas 63 y otras 48 lo hacen de forma indirecta a través de proveedores. Es decir cumplen con el 1% que exige Ley de Inclusión Laboral a empresas con más de 200 trabajadores
De hecho, a casi un año de la entrada en vigencia de la normativa existe un 83% de cumplimiento. Según datos de la Dirección del Trabajo, 2.490 empresas lo hace a través de la contratación directa o de las medidas alternativas. La ley establece que en caso de que una compañía no tenga la infraestructura adecuada para contratar a una persona con discapacidad, esta puede tener contratos con empresas que sí lo hagan o realizar donaciones a fundaciones comprometidas con la inclusión laboral.
Además, el ingreso promedio de los trabajadores contratados se acerca a los $640.000 mil. No obstante y más allá de las cifras, aún existen muchos desafíos para la integración total de este grupo al mundo público y privado.
Fuente: CNN Chile