
La contabilidad: el mal necesario que dejó de servir
Durante décadas, la contabilidad fue considerada el lenguaje universal de los negocios. Sin embargo, hoy vive una crisis silenciosa: se ha transformado en un trámite, un cumplimiento más…
La contabilidad es mucho más que un registro de operaciones: es transparencia, control y trazabilidad. Es la única herramienta capaz de mostrar con precisión cuánto se recauda, cuánto se gasta y en qué se utiliza cada peso.
En la empresa privada, ignorar la contabilidad lleva al desorden, la pérdida de valor y finalmente a la quiebra.
En el Estado ocurre lo mismo, pero con consecuencias mucho más profundas: crisis fiscal, desconfianza ciudadana y deterioro del desarrollo social.
Chile atraviesa una situación crítica:
🟡 El país se administra sobre la base de un presupuesto, es decir, una estimación de gastos, sin un sistema contable integrado que muestre en tiempo real cómo se usan realmente los recursos.
🟡 Cada empresa, incluso la más pequeña, está obligada a llevar una contabilidad rigurosa, pero el Estado no practica el mismo estándar de transparencia que exige a sus contribuyentes.
🟡 La política ha privilegiado la discrecionalidad sobre el control, generando un modelo en el que la ciudadanía no puede verificar si los recursos públicos se usan de manera eficiente.
¿Por qué ningún candidato presidencial ha puesto sobre la mesa la necesidad de una Contabilidad Gubernamental Integrada?
¿Por qué nadie habla de implementar un sistema de “Cuentas Claras”, donde cada peso recaudado y gastado tenga trazabilidad pública y digital?
La respuesta parece obvia: una contabilidad integrada limita la improvisación política, porque convierte la gestión pública en números claros, verificables y comparables.
El cambio que Chile necesita no es solo un nuevo presupuesto ni más gasto social.
Lo que necesitamos es un Estado con Contabilidad Gubernamental Integrada, donde:
🟢 Cada organismo registre en tiempo real sus ingresos y gastos.
🟢 Los presupuestos dejen de ser solo proyecciones y se conviertan en herramientas reales de gestión.
🟢 La ciudadanía pueda exigir la misma rendición de cuentas que hoy se exige a las empresas privadas.
Cuando la contabilidad se usa en su verdadera dimensión, no solo se mejora la eficiencia económica: se fortalece la democracia, se previene la corrupción y se construye confianza.
Porque al final, el desarrollo social no depende solo de cuánto se recaude o cuánto se gaste, sino de cómo se administra y se controla.
Autor: Jorge Valenzuela F.– Gerente General y Fundador de Transtecnia S.A.
de contabilidad, temas laborales, educación, tributarios e innovación

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En Chile, miles de empresas creen estar tranquilas porque “tienen un contador”.
Alguien que se encarga del IVA, de las declaraciones, del balance.
Un profesional que “cumple”.
Pero… ¿Cumple con quién? ¿Con el SII o con el empresario?…

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