El Ministerio de Hacienda, en colaboración con asesores de parlamentarios, se encuentra elaborando un paquete de indicaciones a la reforma tributaria, que debe presentar a más tardar el lunes 12 de septiembre.
Según indicó el presidente del comité de Hacienda de la Cámara Baja, el diputado socialista Jaime Naranjo, se espera que un día después, el martes 13, se realice la votación en general de la reforma, siete semanas después de su ingreso.
Hasta ahora ha sido un trámite interrumpido. El sistema tributario semi integrado, la falta de medidas pro inversión, según la derecha; y la eliminación del beneficio para viviendas DFL-2, preocupan a algunos sectores.
Los diputados Guillermo Ramírez, Miguel Mellado y Frank Sauerbaum, todos de la oposición, son los más críticos a la propuesta, y este último enumeró los principales nudos.
El Ministerio de Hacienda comunicó a la comisión que había decidido plantear mejoras en el incentivo a la competencia y la inversión, ante la posición de algunos parlamentarios de que esta reforma no debería enfocarse sólo en recaudar.
A su vez, en el oficialismo afirmaron que el impacto en el mundo empresarial está sobredimensionado, pero también reconocen que es necesario introducir mejoras, para evitar la caída de la reforma.
El diputado del Partido Comunista, Boris Barrera, señaló que aún no se conocen todos los alcances de ese trabajo, pero adelantó la idea de entregar incentivos tributarios a las empresas por determinadas inversiones.
Otra dimensión del trámite es su relación con la reforma previsional. Según parlamentarios, el Gobierno aún no se ha pronunciado sobre el eventual impacto del aumento de la cotización de 6% con cargo al empleador.
El diputado independiente del comité PPD, Carlos Bianchi, afirmó que esta es una preocupación compartida por varios sectores.
Otro nudo es la resistencia de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), y la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) a la reforma.
El propio ministro de Hacienda, Mario Marcel, y el presidente de la comisión del sector, Jaime Naranjo, han insistido en que el proyecto es necesario y que para los detractores, nunca es momento de aumentar la carga tributaria de las empresas.