Si bien el alza que ha experimentado el precio cobre -que entre enero y septiembre ha subido 16,82% -ha permitido al fisco respirar un poco más tranquilo, no alcanza aún a compensar los mayores gastos del fisco. Este hecho quedó reflejado en que la deuda pública bruta para el segundo trimestre llegó a 23,8% del Producto Interno Bruto (PIB) su mayor nivel desde 1993, de acuerdo a cifras de la Dirección de Presupuestos (Dipres).
Pero esta alza no comenzó recién, sino que se arrastra ya desde 2010. Ese año, el nivel de deuda pasó de 8,6% a 11,1% en 2011. De allí escaló a 11,9% el siguiente año y 12,7% en 2013.
Pero el crecimiento se aceleró desde 2014 en adelante: El primer año de Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, el nivel finalizó el año en 14,9%. Lejos de atenuarse esta senda alcista, se acrecentó, ya que al siguiente año llegó a 17,4%. Y en 2016 superó el 20% del PIB.
De acuerdo a los expertos, el crecimiento de la deuda pública tiene directa relación con la ampliación que ha mostrado el déficits fiscal efectivo que para este año llegaría a -3,1%.
Por esta razón, los economistas prevén que para el cierre de 2017, la deuda pública se acercará a 25% del PIB. “La velocidad con que ha aumentado la deuda pública muestra que no es una trayectoria de gastos viable, porque pese a que se hizo una Reforma Tributaria, los ingresos son insuficientes para financiar los gastos”, señaló la académica de la Universidad de Los Andes, Cecilia Cifuentes.
Sergio Lehmann, economistas jefe de BCI aseveró que detrás de esta alza de la deuda pública hay dos factores: “el primero tiene que ver con que los ingresos fiscales de la primera parte del año que fueron especialmente bajos producto de una economía que creció muy poco y segundo, un precio del cobre que en comparación con lo que estamos viendo hoy día, se mostró bastante más bajo”.
Carolina Grünwald, economista de Libertad y Desarrollo (LyD) subrayó que “la deuda aumenta porque se gasta más de lo que se tiene”. En ese sentido, la experta añadió que “pasamos de US$30 mil millones a US$60 mil millones, lo que es un aumento muy rápido. Esto es preocupante porque fue uno de los argumentos que utilizaron las clasificadoras de riesgos para bajarle la nota crediticia de riesgo soberano a Chile”.
Factor cobre
Si bien los expertos afirman que el precio del cobre ayudará a amortiguar la senda alcista, todavía no es suficiente para frenar el crecimiento de la deuda.
En este punto, Cifuentes indicó que “el precio del cobre ayuda, porque el endeudamiento se produce por la diferencia entre ingreso y gasto efectivo, por lo que a medida que el precio mejore, esa brecha se disminuye y la tendencia se atenúa”.
No obstante, Cifuentes precisó que pese a ello, “vamos a seguir con una situación fiscal bien restrictiva sobre todo a partir del año 2019”. A su vez, Lehmann dijo que para la segunda parte del año, si bien habrá un aumento adicional a de la deuda pública, no será de la misma magnitud que el primer semestre, porque la economía sí está mostrando algún repunte en la actividad y los mejores precios del cobre.
Presupuesto 2018
Este escenario de creciente deuda pública, será un tema de primer orden en la discusión presupuestaria 2018 que comenzará el próximo lunes.
“En la discusión de la ley de presupuesto se debe buscar la fórmula para que el gasto aumente lo menos posible y al mismo tiempo velar para que se ejecute de manera eficiente”, puntualizó Grünwald.
Lehmann, en tanto, comentó que este tema “debería ser un elemento importante a considerar en la discusión presupuestaria para reforzar que se debe ser responsable en materia de gasto”.
Artículo de Carlos Alonso
Fuente: Pulso