En tanto, las personas ocupadas informales totalizaron más de 2,4 millones, lo que representa un alza de 13,3% en ese mismo período, es decir, hubo 288.393 personas en esa situación más que en octubre-diciembre de 2020.
Las personas ocupadas informales se incrementaron tanto entre los hombres (7,4%) como en las mujeres (21,9%) y, según grupos de edad, lo hicieron principalmente con alzas en los tramos 25-34 años (12,3%) y 45-54 años (13,0%).
Según sector económico, el aumento de las personas ocupadas informales fue incidido en especial por quienes trabajan en el comercio (13,7%) y en la construcción (21,4%). Por grupo ocupacional, la variación fue impulsada por los trabajadores de los servicios y comercios (24,2%) y artesanos y operarios de oficios (14,6%).
En tanto, las categorías ocupacionales que más influyeron en el alza de las personas ocupadas informales fueron los trabajadores por cuenta propia (23,5%) y personal de servicio doméstico (39,5%). Ambas categorías presentaron, a su vez, las tasas más altas de ocupación informal, con 70,9% y 49,9%, respectivamente.
Por otro lado, la gran mayoría de las personas ocupadas informales (el 84,5% del total) fueron trabajadores por cuenta propia (poco más de 1,3 millones de personas) y asalariados del sector privado (más de 757.000 personas).
¿Cuándo una persona es ocupada informal?
Las personas ocupadas informales son quienes trabajan de forma dependiente pero sin acceso a seguridad social (salud y AFP) por su vínculo laboral. También lo son aquellas que trabajan de manera independiente en una empresa, negocio o actividad que pertenece al sector informal. Los familiares no remunerados del hogar también se consideran personas ocupadas informales.